Revistas Especializadas para la Industria del Hormigón

El proyecto FastCarb se inició por dos motivos: por un lado, la producción de cemento origina un importante porcentaje de las emisiones de CO2 en todo el mundo (5-7 % del total de emisiones), de las cuales alrededor de dos terceras partes se deben a la descarbonatación de la piedra caliza durante la fabricación de cemento portland. Por otro lado, es necesario llevar a cabo un consumo cuidadoso de las materias primas naturales, y se dispone de grandes cantidades de hormigón de demoliciones. Aunque actualmente ya se pueden utilizar áridos procedentes de hormigón reciclado granulado (HRG), su elevada porosidad limita el rendimiento del hormigón. Los áridos reciclados contienen en la matriz de cemento portlandita y silicato de calcio hidratado (C-S-H), que se pueden carbonatar. Por eso, con el proyecto FastCarb se persiguen dos objetivos: por un lado, la captación de CO2 en el HRG para reducir el impacto ambiental provocado por el hormigón en las construcciones y, por otro, una mejora cualitativa de estos áridos reduciendo su porosidad. El primer objetivo presupone la optimización del proceso de carbonatación acelerado del HRG y el segundo, la posibilidad de utilizar este tipo de procesos a escala industrial.